La empresa familiar actual, según indica el VI Barómetro Empresa Familiar, encuentra en el incremento de la competencia, el principal reto al que se tiene que enfrentar. Las empresas familiares españolas suponen el 51% del total.
Pero no es el único, y entre los restantes retos para estas empresas, cabría destacar:
- Necesidad de disponer de buenos profesionales: disponer de los profesionales más talentosos, preocupa al 40% de estas compañías.
- Disminución de la rentabilidad, es un problema que afrontan el 32% de las mismas.
- La incertidumbre política, preocupa al 26%
- Incremento de los costes laborales, en el 21% de los casos.
- Los cambios regulatorios, inquietan al 18%.
El acceso a la financiación se queda fuera de este Ranking de 5, perdiendo fuerza durante los últimos años; de hecho, el 82% de los encuestados afirma no haber tenido problemas para obtener financiación ajena durante el año 2017.
Garantizar la continuidad de la empresa familiar durante las próximas generaciones, es uno de los mayores retos a los que hacen frente los propietarios de este tipo de compañías. Una decisión que puede marcar el éxito de la empresa y su solidez de cara al futuro.
Respecto a este punto, el 20% de los encuestados afirma considerar traspasar la gestión de la empresa a la siguiente generación, mientras que un 10% tiene previsto hacer lo propio con la titularidad de la empresa. El 9% se decanta por traspasar el gobierno (control último) de la empresa a la siguiente generación, y el 8% se inclina por designar un consejero no delegado no perteneciente a la familia, pero conservando la titularidad. Solo el 6% planea vender la empresa a un tercero.
A la vista de estos datos recogidos en el estudio de referencia de la empresa familiar actual, la longevidad de este tipo de empresas parece asegurada en el medio plazo.
Gestoría Bautista